Gente que se dio una vuelta


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30 de septiembre de 2011

Nerds del mundo, uníos II

En la entrada del 13 de marzo (http://robertotelopidoporfavor.blogspot.com/2011/03/nerds-del-mundo-unios.html) comentaba que Iñaki me había recomendado un libro: Through the language glass: why the world looks different in other languages. Finalmente, lo conseguí gracias a una amiga que venía desde Estados Unidos.

¿Es diferente pensar en alemán, español, hebreo?. Un bosquimano, ¿puede entender el concepto ascensor, siendo que ni conoce la electricidad?. ¿Percibimos el mundo por y lo expresamos sujetos indefectiblemente a un idioma?; ¿esto afecta el modo en que percibimos, por ejemplo, los colores?.
Sí, no, un poco, no tanto: todas las respuestas son ciertas. Pensamos de un modo, en un molde, lo que no quita que podamos amoldarnos a otros.

Por ejemplo, en español -y otros idiomas-, si digo juega no se sabe si es un él o una ella quien juega. Pero en hebreo, es en el verbo donde se indica el género, no en el pronombre. Otras lenguas, incluso, distinguen más de 14 géneros: masculino, femenino, animal, vegetal, cosas líquidas...
Otros no tienen algo tan básico como los conceptos derecha e izquierda, detrás, adelante; se orientan por los puntos cardinales, que, claramente varían cada vez que se mueve el hablante...

No por nada es tan complicado entenderse...

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