Gente que se dio una vuelta


© Copyright

Si querés copiar y pegar, claro que podés; pero citá la fuente, ¿sí?. Gracias.

12 de noviembre de 2011

Pegá un grito, pordió! II

Continúo lo del otro día - Pegá un grito, pordió!-

En un punto creo que los pasivo-agresivos son cobardes con un sesgo perverso:
cobardes porque no se animan a enfrentarse con lo que sienten/piensan/les sucede; con un sesgo perverso porque buscan el modo de proyectar o depositar eso en el otro para poder exorcizarlo: al no ser ellos quienes lo verbalizan o actúan, es el otro quien queda en lugar de malo, inferior, agresor, duro, lo que fuere.

Y si el otro no tiene cierta estructura sana, mínimamente firme, estable, termina creyendo que sí, que es el culpable de lo que sucede, de lo que le pasa a ambos.
Es una trampa para ambos, para todos.

No hay comentarios: